El cerebro es uno de los órganos más importantes del cuerpo humano. Se encarga del control de la frecuencia cardíaca, la respiración, el movimiento del cuerpo, de los cinco sentidos y de la temperatura corporal.
Para poder llevar a cabo esas funciones, es necesario que intervengan sus 3 componentes principales: el cerebro, el cerebelo y el tronco encefálico.
Cada parte del cerebro tiene una función diferente:
- El cerebelo: ubicada justo debajo de la corteza visual. Controla la coordinación y ayuda con el equilibrio y el movimiento.
- La parte frontal del cerebro: es el centro de las emociones, la inteligencia y el razonamiento. Es la zona que determina gran parte de su personalidad. Los recuerdos se almacenan principalmente en ambos lóbulos temporales.
- El lado derecho del cerebro: controla los músculos y la sensibilidad del lado izquierdo del cuerpo. El lado derecho también dirige la capacidad de resolución de problemas y las facultades espaciales, por ejemplo, la capacidad de apreciar la distancia y reconocer rostros. Controla muchas actividades artísticas y de imaginación.
- El lado izquierdo del cerebro: controla los músculos y la sensibilidad del lado derecho del cuerpo. También controla la mayoría de las habilidades verbales y del lenguaje.
- El tallo (o tronco) encefálico: controla las funciones básicas del organismo, como la respiración, la circulación de la sangre y la deglución (tragar) de alimentos. También controla el movimiento y los sentidos de los músculos de los ojos, el rostro, la cabeza y el cuello. Esto incluye tragar, sentir sabores y escuchar.
- La parte posterior del cerebro (lóbulos occipitales): controla el sentido de la vista.